El pasado

Película francesa de director iraní,en la que sale Berenice Bejo, protagonista de The artist, esa peculiar película muda ne Blanco y Negro que tanto éxito tuvo hace un apar de años. Una historia un tranto trivial, de personajes triviales, que desgrana como las personas somos parte de una comedia dramática en la que vamos interpretando personajes a veces sin mucho criterio, improvisando una partitura que nos lleva a destinos insospechados, afortunadamente. A veces nos toca ser los buenos, a veces los malos, a veces entregarnos, a veces ser egoístias. Eso somos, y mucho más, todo según el momento.

La película es lenta, pero está bien, me gustó, y lo más curioso, es que no recuerdo como acaba, lo que debe querir decir que es buena.

CAMILLE REGRESA (Camille redouble)

Vuelta al cine, a los ciclos de cine Francés, otro clásico de este blog, a ver una película inquietante.. Una cuarentañera viaja a su adolescencia y se enfrenta a vivir su pasado cononciéndolo. La situación te hace pensar, el pasado ya no existe, se fue, no está, no se debe ni se puede volver a él, pero y si... No me arrepiento de gran cosa de lo que he vivido, pero de saberlo, hubiera hecho muchas cosas distintas... pero probablemenete, en ese caso, yo no sería ahora como soy, porque mis errores, mis fallos y mis aciertos son lo que han hecho de mí lo que soy. Y la verdad, después de tanto tiempo, a pesar de todo, uno se coge cariño a sí mismo, así que me conformo con ser como así, aunque muchas cosas que hice o hice, ahora, igual las cambiaría. Menos mal que no se puede volver al pasado, aunque echemos cosas de menos...

Otra Garris, en Italia, Lago de Garda

Un año más a la Garris. Pasan los años, y ya van unas cuantas, desde la primera que ya apareció por este blog. Quizás ya no tengo tanta energía como entonces para contar las cosas estupendas que hago, quizás ya no tengo tanto tiempo, pero sigo adelante, porque el tiempo da valor a lo que uno vive. Y una de esas cosas valiosas es la Copa Garris, sin duda, un lujo, una de esas cosas que la vida te regala. Compartir unos días al año con gente estupenda, no parar de reír en cuatro días, viajar, comer, beber alguna cerveza que otra, y entre una cosa y otra, jugar al golf en lugares espectaculares.
Aunque este año he jugado bastante, no tuve mi día, o mis días, pero da igual, no gané, otro año será, la cosa está al caer, creo que en diez o veinte años como mucho me hago con ella. Entre tanto, a disfrutar de este evento.

Este año estuvimos en Italia, en el lago de Garda, cerca de Milán, de los Alpes... Un sitio fantástico al que habrá que volver con más tiempo.
Por cierto, con unos caracoles enormes.