Este verano nos quedamos unos días de recuperación en Asturias tras los Pedales de León. Con un poquillo retraso, subo algunas de la fotos que hice con la Sony patatera, porque tenía la Cannon missing in action. Hay que reconocer que la Sony no se portó mal. Arriba unos caracoles trepando por una pantalla acústica transparente de una carretera.
Visitamos un poblado minero (Bustiello creo) muy interesante desde el punto de vista urbanístico. Pero yo me fijé en los colores de las pinzas.
No podía faltar la visita a los edificios prerrománicos asturianos, como Santa María del Naranco.
En la carretera, no se debe pasar de 40, porque abundan los turistas y las curvas. La señal, como ya tiene sus años, empieza a mostrar arrugas.
En Gijón, me llamó la atención esta pintada en una puerta, verdadero trampantojo divertido.
Por la calles de Gijón me dediqué a la fotografía abstracta, fotografiando desconchones de pared en los que las sombras crean extrañas formas.
En este caso, el desconchón es más colorido. La verdad es que son interesantes las texturas que aparecen, sobre todo tras un equilibrado de la exposición en el Photoshop.
Otra imagen de Gijón, una ciudad que me sorprendió. Tengo más fotos, estaba inspirado, se ve que el porrazo de la bici activó el fotógrafo que llevo dentro. Igual subo alguna más...
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