domingo, julio 31, 2011

Teatro en Almagro, una vez más

Vuelta al teatro, vuelta a Almagro. Este año, por partida doble. La primera obra que vimos, gracias a la ya tradicional generosidad familiar de Kla, fue "Todo es enredo amor", de la Joven Compañia Nacional de Teatro Clásico. Si quieres ver fotos, como no dejan hacerlas, tienes las oficiales aquí.

La obra me gustó mucho, bien llevado el verso, que encajaba bien. He de reconocer que algunas adaptaciones del texto clásico, mejor dicho actualizaciones, me dejaron un poco descolocado, puesto que uno no sabe qué está oyendo, ni cuando el libreto original es cambiado. Pero bueno, se supone que eso se hace para mejorar la obra, no para descolocar al público.

La interpretación de los jóvenes es muy buena, y el montaje me gusto mucho, sobre todo por la incorporación de la música en directo a la obra. Un pianista hace en cierta medida de relator y acompaña los momentos más intensos de la trama con siempre acertadas melodías.

Si te interesa una crítica mejor por alguien que entiende más que un servidor, échale un ojo a la crónica de La Tribuna.

La segunda obra que vimos fue "Twelfth Night" (Noche de Reyes) de William Sakespeare. Las fotos ahora aquí. Se trata de una adaptación de la Filter Theatre Company en asociación con the Royal Shakespeare Company, en versión original con sobretítulos, muy interesante y divertida. La trama incorpora músicos capaces de marcar interesantes ritmos a los que los actores acompañan convertidos en interpretes ellos también. Los actores, pese a la barrera del idioma, introducen al público en la obra, y todo el mundo se lo pasa bien, sobre todo los actores, que mostraron al público los brutales efectos del sol manchego en las carnes británicas (uno de los actores estaba quemado como una gamba a la plancha). Anécdotas solares aparte, la obra es divertida y pasamos un buen rato aprendiendo que no conviene hacer apuestas, que puedes acabar burlado.

Tras el teatro, otra tradición, cañitas en la plaza, al fresco, que estamos en la Mancha.

jueves, julio 14, 2011

Amigos

Por esas cosas de las redes sociales, descubrí que el director de esta peli es amigo, o compañero, de unos de los compadres de la Garris. Por ese motivo, y porque estamos en verano y apetece reír más que pensar, decidimos darle una oportunidad a estos amigos.

La peli es bastante divertida, con algunos golpes buenos. La historia, unos colegas que, como consecuencia de una apuesta, tienen que conseguir audiencia televisiva a toda consta, lo que les lleva a hacer el ridículo de diversas maneras.

Los tres actores encajan a la perfección en sus caracteres: un niño pijo que vive con su madre y se dedica a intentar ligar con todo lo que se menea, un arquitecto de éxito a la sombra de un bella mujer manipuladora, y un pobre diablo separado vigilante de la hora y desastre con patas.

Las situaciones del guión son reflejo de la sociedad mediática en la que vivimos, donde payasos encerrados en una casa, pseudofamosos de medio pelo poniendo los cuernos sin parar, o gentuza que no tiene inconveniente en contar sus miserias antes las cámaras, se han convertido en un referente para esta decadente sociedad españistaní.

Martes con mi viejo profesor

Extraño libro, porque no es una novela, pero lo parece. Se trata de una historia biográfica que recoge conversaciones entre un viejo profesor de sociología que está enfermo de ELA (una de esas enfermedades degenerativas) y sabe que le queda poco tiempo. Durante unas tardes van conversado sobre la vida, sobre lo que de verdad es importante.

El libro, aunque previsible, no deja de transmitir un mensaje de optimismo y es una agradable lectura de píldoras de esencias vitales. Básicamente, que estamos de paso, y que aquí, no deberíamos tener más objetivo que compartir momentos con la gente que nos rodea.