domingo, octubre 23, 2016

Un monstruo viene a verme


Antes que nos la terminasen de reventar con tanta publicidad televisiva nos fuimos a ver esta película española rodada en inglés que vimos doblada para españolizar más la jugada, y vivir así sumergidos de pleno en esta incongruencia de país.

La película está bien, bien rodada, buena música, con referencias preciosas al mundo del dibujo, y encajando bien un tema complejo, haciendo que te creas un monstruo increíble. Quizás lo menos bueno sea un cierto efectismo final, buscando lágrimas fáciles alrededor de la muerte de la mama del niño, que se supone real, pero se convierte en un momento absolutamente falso, que solo busca emocionar al espectador (innecesariamente en mi opinión). La muerte, desgraciadamente, no es así en el mundo real.

Por lo demás se deja ver, y espero que gane mucho dinero, que la economía está muy mal.

MARILLION: FEAR (Fuck Everyone And Run)


Bueno, no sé si es el 18 o por ahí de los discos de estudio de Marillion. Cuando una banda llega ahí, ¿es posible innovar? ¿es posible mejorar? ¿queda algo por decir? En la mayoría de la casos, la respuesta es no, no, y no, por eso, los grupos acaban, salvo excepciones, languideciendo en su éxito, viviendo de sus hits de cartónpiedra. Pero con Marillion, la respuesta es si, si, si, claro que si, y aquí llegan estos abuelos y lo vuelven a hacer, vuelven a poner el listón lejos de la vista de la mayor parte de la mediocridad musical que nos rodea.

FEAR empieza con el Dorado, divido en cinco maravillosas partes. Habla de los refugiados, a los que no podemos dejar entrar, de nuestro miedo, del mundo en un bolsillo gracias a un smartphone, porque todo está en todas partes. De guerras de dinero disfrazado de religión, y de nuestro miedo, y de lo que hay en mi cabeza, y tu no puedes ver... Musicalmente un medio tempo hiperelegante, todo perfectamente encajado, guitarras melancólicas, que empieza lento y termina lento, recordando que somos nietos de los monos, y solo cuando nos sacudamos el miedo, podremos ser ángeles (aquí se podría ver un referencia a 2001, pero quien sabe).

Living with fear, quizás el tema más comercial con un estribillo pegadizo, pero es mucho más. También es lenta en las estrofas, y más contundente en el estribillo, con un guitarreo sutil in crescendo, que acaba en un coro casi gospeliano. Va del miedo que nos impide desarmarnos, y que nos lleva a construir muros. El mundo tal cual es.

The leavers, también dividida en 5 partes. Wake up in music. con una ambientación de teclados y cimbales muy sugerente, va de los que parten y aparecen en cualquier parte del mundo. The Remainers, los que se quedan, que también tienen su historia, y quedan esperando encontrar a alguien nuevo, en algún nuevo lugar (chispa breve, pero preciosa). Engancha con Vapour trails in the sky, con pasaje un machacón ritmo de guitarra, Rothery en su mejor esencia, arropado por los pianos (de lo mejor del disco), que acaba en un final silencioso, perfecto. Y luego, The Jumble of Days, que con solo dos párrafos continua impresionante evolución del tema, ahora con más protagonismo del bajo, siempre discreto, siempre presente, y con un final épico, muy de Marillion. El tema termina con One Tonight, bestial colofón en el que los que se van y los que se quedan (leavers and reminers) se unen al fin para desencontrarse, con un solo de guitarra perfecto para poner el punto final. Un tema complejo y largo, una joyita llena de momentos memorables.

White paper, un tema que empieza muy lento, solo piano y voz, para ir tomando cuerpo, parar, y volver a arracar. Sólido, con un cierto toque a The 21st century.

Y acaba el disco con The new kings, una joya en cuatro actos. Fuck everyone and Run, abre el tema, va sobre los nuevos reyes del dinero, que viven en rascacielos, lejos del mundo, camuflados en paraísos fiscales, que nos joden a todos y huyen como filosofía de vida. Son demasiados grandes para caer, y si caen, caen encima de nosotros (se ve que Marillion también compró accciones de Bankia). Perfecto encaje de teclados y guitarra. Después, Russia Locked doors, fantásticas progresiones de guitarra sobre teclados, para ascender y contarnos que la codicia es buena. Y tienen soluciones para todo, porque aúnen crisis, salen ganando (trickle-down economy, my friend). A continuación, A scary sky, cuando llega la crisis para que nada cambie. Muy buena porción, pueden hacer lo que quieran hoy con los ordenadores. Y de ahí, paso a Why nothing is ever true, donde Marillion se desata, donde surge esa máquina de hacer música que es el bajo de Pete Trevawas, y todo toma sentido para llevarnos a un tiempo en el que nada importa. Banderas, patrias, etc. han dejado paso a los nuevos reyes, trabajamos para ellos. Apoteosis final con el solo, in crescendo musical, brutal.


Tomorrow 's new country, breve cierre del disco, que cierra la historia, que retorna a los emigrantes. Y te quedas pensando en cuanto falta para el siguiente disco. Lo han vuelto a hacer, y van unas cuantas. Un lujo para iniciados.

Aquí una crítica más seria: http://www.rock-progresivo.com/critica-del-disco-de-marillion-fear-2016/2016/09/

El disco está en Spotify, échale unas oídas, no te arrepentirás.