domingo, octubre 18, 2009

Tablas de Daimiel: polvo, turba y fuego

Aprovechando el día de fiesta, el pasado lunes nos fuimos a ¿disfrutar? del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel. Dejamos los coches en Puente Navarro, con su molino recién restaurado por fuera, y comenzamos a rodear el parque.

Todo seco, llegamos a Zuacorta, molino en el Guadiana que están restaurando despacito, despacito. A ver si cunde el ejemplo y se rehabilitan otros de los muchos molinos hidráulicos de la Mancha... Solo allí vimos un poco de agua, pero nos fuimos pronto porque el humo de las turberas en combustión era bastante desagradable. Está todo tan seco, que el suelo arde... una pena.

Seguimos por una pista asfaltada y llegamos al molino de Griñón, otra ruina hidráulica esperando su turno, si alguien llega a tiempo (lo que no creo que vuelva jamás es el agua pasar bajo sus arcos). Desde allí, seguimos bordeando el parque con más de un parón por culpa de los p... abrojos. A trancas y barrancas, llegamos a Villarrubia de los Ojos (debería llamarse de los Ojos cerrados, porque hace mucho que ya no lloran agua del Guadiana) luchando con un incómodo viento de cara. En el pueblo unos botellines y nos comimos los bocatas.

Vuelta por el norte, siguiendo el estercolero/colector de aguas verdosas que es el Cigüela. Más abrojos, con el viento en popa, rodamos rápido para llegar a una vieja finca abandonada que parece que se llama Casablanca. Más abrojos....

Seguimos por una zona de encinas junto al carrizo del parque, convertido en un secarral. Las encinas espectaculares, y llegamos a Vega Zacatena, y de vuelta al Puente Navarro.

El paisaje es bonito, pero todo está demasiado seco, y por la época que es, no vimos casi ni un pájaro, claro que con el agua que hay, no creo que venga ninguno. D.E.P. el Parque Nacional de las Tablas de Daimiel.

3 comentarios:

ANZAGA dijo...

Casualmente comí en el molino de puesto Navarro ese mismo día...

Tienes toda la razón está todo que da mucha pena. A ver que pasa con los cambios que se prevén. Saludos.

caius dijo...

Esperemos que con tranvases, PEAGS (Plan Especial del Alto Guadiana) y otras medidas algún día este espacio recupere su esplendor. Creo que lo primero es darse cuenta que el agua no es un bien inagotable, lo segundo priorizar, y lo tercero, utilizar mejor. Pero es difícil, porque las zonas que se riegan en la provincia de Ciudad Real son las que más riqueza tienen, el resto, no son más que cuatro cotos de señoritos que poseen hectareas y hectareas a las que no se les saca rendimiento, mientras los pueblos sufren una imparable sangría demográfica. Hace falta un cambio de modelo económico: Castilla - La Mancha debería aspirar a ser el parque de recreo y contacto con la maturaleza de Madrid... pero con orden y un plan. Supongo que acabarán haciendo un pacto... Que largo me ha quedado esto...

Anónimo dijo...

Muy interesante tu ruta. Me da envidia así que la próxima vez que valla por Villafranca prometo intentar emularma. Procuraré tener en cuenta lo de los abrojos. Haber si me libro de ellos...
Por lo demás... Una pena... Ójala nos demos cuenta pronto que la única manera de vivir y perdurar como especie es integrarnos con el medio ambiente. Aprender a vivir sin sobreexplotarlo. Las Tablas como la Mancha Húmeda tiene sus dias contados. Como no hagamos algo y pronto. Y nó precisamente trasvases.