domingo, febrero 04, 2007

Bicis y gachas


Fin de semana de celebraciones. El sábado estuve comiendo con unos compañeros del trabajo en el restaurante del Santuario de las Nieves, en Bolaños. Es un sitio que siempre me ha gustado desde que iba de chico con mis padres y la familia y jugaba con mis primos en la plaza de toros. Después fuimos al Almagro a tomar un café al Corregidor. Un itinerario conocido. Es curioso, pese a que me trae recuerdos tristes, me encanta ir a Almagro. Allí hice la foto de esta bici clásica.

Clásica como mi primer regalo de cumpleaños un 2CV virtual, que parece que tiene historia. Aquí queda el guante para que los gallegos de pontedeume se expliquen. Tras el motocarro y el 2CV, abro otro apartado en este blog poliédrico: clásicos (coches) de ayer, o el coche de cuéntame.


Por la noche cenilla con los amiguetes y unas cervezas con el gran Mani. Aunque nos acosaban hordas de mujeres ansiosas, decidimos retirarnos pronto, él por obligaciones familiares, yo para no perdonar la ruta del domingo en bici.

Hoy hemos estado en el entorno de Picón y el Guadiana, en una tabla que se llama "de la Patata". La ruta ha estado bien, pero como hay mucha humedad de la nevada y algún que otro chaparrón que ha caído estos días, hemos tenido que volvernos por otro camino porque había mucho barro. Ni que decir tiene que hemos dejado las bicis y la indumentaria hechas una guarrería. A la vuelta última celebración porque una de las chicas de la peña se ha comprado una bici nueva y es tradición que el que estrena invita. Nos hemos tomado unas gachas memorables.

Me parece que la próxima invitación va a ser mía, porque las presiones para que cambie de bici son intensas y la verdad es que me dan ganillas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Aaaah, si ese coche contara¡...
Aunque el aspecto reluciente que presenta en la instantánea pertenece a su juventud, terminó sus días con las marcas propias de una vida intensa.
Entre sus últimas hazañas recuerda, con especial cariño, la tourné que se hizo por Marocco con tracción en una sola rueda. Días en que ya en vez de freno de mano tenía freno de pié, gracias al generoso agujero que lucía bajo los piés del "piloto". Y a partir de los cuales tuvo que contar con menos piezas, de las pocas con que ya contaba, después de ser desmontado laboriosamente por la guardia civil de Algeciras, sin haber vuelto a ser recompuesto del todo por su ingrato e ignorante dueño. A pesar de todo, me devolvió a casa.

caius dijo...

¿Qué traeríais, o a qué olería el coche para que la Guardia Civil lo desarmara en Algeciras? Lo raro es que te dejaran pasar con esa matrícula O-OOO-O :-)