La Semana Santa se presentaba sin grandes emociones, pero ha sido un poco rollo por la lluvia, que prácticamente no ha parado para alegría de agricultores y desgracia de cofrades. Esta semana asistimos a la inauguración (extraoficial) del piso de la rubia, un coqueto apartamento la mar de resultón.
Puesto que llovía y llovía, lo único que hemos hecho ha sido comer y comer, sobre todo gracias a la visita de losgallegosdepontedeume. De entrada cena en el restaurante Doña Croqueta, donde les hice este retrato surrealista en una servilleta. No se sabe quién es quién, pero da lo mismo.
El sábado estuvimos comiendo en Retuerta, cerca del embalse de la Torre de Abraham, dónde tomé la foto de la cabecera del post. Allí, unos desaprensivos hiperactivos habían secuestrado unas niñas metiéndolas en el maletero de un coche. Tras una ardua investigación de los posos de vino de una copa de Torre de Gazate, pudimos rescatar a las pobres niñas, aprovechando que el jefe de los criminales, conocido como Mr. Amosanda estaba echado la siesta.
En este estado encontramos a los pobres criaturas, víctimas de los desaprensivos criminales.
He aquí algunos de los delincuentes, obsérvese como uno de los cabecillas mira al cielo por si aparece algún helicóptero de la policía:
Este es fondo de la copa de vino dónde encontramos la clave para localizar a las niñas. No explico más puesto que resulta evidente.
Este es el cabecilla de los criminales, el Capo Amosanda, en un momento de distracción.
3 comentarios:
Tres bien astucieux inspecteur Dodó, très capable en déchiffrant la piste du vin.
Mais jamais vous nous trouverez avec cette image robot.
Aux enfants je les ai libérés puisque ses pères n'ont pas offert un franc par leur sauvetage.
Le terrible "Amosanda"
Tipejo peligroso ese amosanda y sus secuaces. El que busca el helicoptero creo que puede ser el conocido delincuente "muñon". Seguiremos investigando
Muñón de Morales creo que es su segundo apellido. Dicen que actuaba en Toledo, dónde le llegaron a responsabilizar de la toma del Alcázar (botellín de cerveza jienense que quedaba en el fondo de algún bareto cutre reconvertido en cervecería de moda).
Hay que tener cuidado, pueden volver a actuar...
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